[HORIZONTES]

Estaba el Papa en Castelgandolfo, en su periodo vacacional y al finalizar éste, fue a recogerlo su chofer con el vehículo oficial. A ésto que el Papa le dijo al chofer que le apetecía conducir a él. De modo que el chofer no pudo objetar nada y pasó a ocupar el asiento trasero. El Papa, aficionado a la velocidad, fue apretando el pie derecho. En éso que pasó junto a un control de radar y el policía, atónito por lo que vio, llamó a la superioridad para consultar si debía multar al vehículo que había pasado.
En la central le dijeron que por supuesto, a lo que replicó el agente : pero ... ¡es que se trata de alguien muy importante!. Le preguntaron si se trataba del Alcalde y respondió que mucho más. Le preguntaron si era algún ministro y respondió que era mucho más importante. Le preguntaron si se trataba del Presidente de la República, a lo que de nuevo respondió que mucho más importante ...
Desde la central de policía le preguntaron que de quién se trataba, a lo que el policía respondió que, aunque no había podido ver al ocupante del vehículo, seguro que se trataba de Dios !!! porque el vehiculo era del Vaticano y llevaba de chofer al Papa !!!

[JOCH]

Genial.....

[waman]

Un abrazo.