Juan Estol, que te puedo decir……he recorrido unos cuantos km en tu despedido Discovery 2, encantado de incluirte. El ser o no landrovero creo que no depende tanto de si tenés un Land –obviamente que es mejor tenerlo- es una actitud, la actitud de colabroración, de ayudar al otro, de solucionar problemas con lo que se tiene, y por encima de todo, las ganas de participar. En cuanto a tus “repuestos”, espero que se de pronto la concreción de tu cirugía, para no sufrir más con esos dolores. A pesar de tus nanas, predomina en vos las ganas de participar, asumiendo que mi Land no es el vehículo más confortable, pero después de todo parece que no te maltrató mucho. En cuanto a asados, ya sabes…….no es algo a lo que me niegue ja ja
En cuanto a la incomodidad de un Serie I, cosa que para nada niego, durante éste paseo hay varias cosas a rescatar acerca de la no conformidad por parte de la mayor parte de la gente para usar un Land viejo, y no sólo me refiero a un Serie I, hasta la Serie III abarcaría lo que diré a continuación; al fin, no son muy parecidos.
En el 109 diesel, si alguien no se queja del ruido del motor, realmente tiene que ser sordo, el ruido no resulta molesto andando despacio, en un trillo, pero en la ruta, es algo bastante molesto y cansador para la cabeza…..hacer 200 km por ruta con un 2 ¼ l diesel es molesto, no hay por qué ocultarlo, a mí me molesta, me pongo algodón en las orejas. Las mujeres que participaron en la actividad, si bien pudieron conversar, no fue de la manera más sencilla, por no decir a los gritos, porque tuvieron que hablar fuerte, cosa que también cansa.
Quien tiene un Land viejo, con volante a la izquierda, sabe que el asiento del conductor resulta un muy eficiente sauna en verano, con las piernas calientes, los pies calientes, con una ventanita chica (si no te animas a sacar la media puerta), lo que resulta espectacular es el ventilete bajo el parabrisas, es la salvación. En invierno, el conductor se beneficia un poquito por el calor del caño de escape, el cual no llega a los pasajeros; si no te abrigas lo suficiente, la hipotermia está asegurada……me refiero a viajes largos.
El volante de dirección, grande, y pesado (en relación a cualquier vehículo moderno) para girar, que en casos de que el vehículo no tenga el mejor mantenimiento, el juego libre es un compañero de viaje asegurado, lo que requiere mayor concentración para mantener una trayectoria decente….otra cosa que cansa.
Como bien sabe Juan Estol, la suspensión dura, que es otro punto que a la gente no le gusta de los viejos Lands.
El pedal de freno, duro, muchísimo más duro que el de cualquier auto moderno. En cuanto a que no frenan los Land, es una mentira, frenan bien. No frenan si se los tiene guardados 10 meses, y se los usa 1 o 2; porque tienen cilindros de freno trancados, mala regulación, etc etc. Las quejas del motor que suelo escuchar “no me arranca”, “me falla el motor”…..éstas cosas se resuelven con una frase que algunos me dicen que repito demasiado, “¡hay que usarlo!”.
Es necesario hacer revisión de 7 niveles de fluidos lubricantes, y de nuevo éste punto se agrava si el vehículo no tiene un mantenimiento óptimo.
Circular con un motor de escasa potencia, además de que la velocidad crucero de éste tipo de vehículos debería ser de 60 o 65 km/h, para no matarlos rápidamente es otra cosa que desalienta el uso.
Las cajas de cambio principales, que dependiendo del modelo, no cuentan con mecanismo sincromático en la primer y en la segunda relación. La mayoría de la gente maneja haciendo ese ruido espantoso “¡CRRRRRRRRRRRRRRRRRR!” al engranar primera o segunda.
En fin, todo lo anterior, sumado a que la mayoría de la gente tiene un vehículo moderno para su uso diario, cosa que me parece bien, me pregunto cuantos de esos usuarios están realmente dispuestos a usar su viejo Land. ¿Cuántos están dispuestos a bajarse de un asiento confortable, con pedales blandos, con potencia de sobra, con mucha mayor velocidad crucero que la de un viejo Land, a contar con aire acondicionado y calefacción, a casi no escuchar ruido del motor?. Por lo que he escuchado, me sobran dedos de una mano para contarlos.
Cada vez que veo un viejo Land remolcado por otro Land más moderno, o por un vehículo de otra marca, me deprimo un poco, pienso que ese viejecito remolcado tiene la cadena perpetua de estar parado en un garage, obteniendo sólo libertad transitoria para ir a algún evento de Land, o para ir a la casa del balneario durante el verano; en otras palabras, directamente pienso que un vehículo así está “sólo para la foto”, ésto es independiente de si el Land está restaurado como cuando salió de fábrica, o con pátina, como lo suelen llamar.
Dejando de lado los viajes carreteros, en los cuales obviamente reconozco que un Land no es lo más adecuado en los tiempos que corren, en uso urbano y suburbano, un viejo Land puede ser usado sin problema, pero la gente hoy en día quiere todo rápido, todo ya, todo con un simple clic, y con el mínimo esfuerzo. Me pregunto si sería lógico pensar que los viejos Land van con rumbo hacia la extinción…..siempre creo que habrá un Land tras una vitrina en museos del automóvil, o en casas particulares, pero también hay dinosaurios en museos, y se extinguieron hace mucho mucho mucho tiempo.
Por dar un ejemplo fuera de la marca, el FORD T, de los años 20, que circula a unos 40 km/h de velocidad crucero, con freno en la caja de cambios, y podría decir que con los mismos contra de los Lands, ya no sea un vehículo recomendable para andar hoy en día, pero un Land no tiene problema.
Personalmente, acepto que estoy tratando de salir lo menos posible, porque el costo del combustible es demasiado alto, pero……mientras pueda, voy a seguir con mi viejo Land.
Si leíste esto, me gustaría que opines, pero mucho más me gustaría que muevas a ese viejito que tenés parado en el garage, ¡muévelo, dale vida!, muéstrale a tus hijos que se puede andar a 60, que no todo es cómodo, silencioso, y suave. Muéstrale a tus hijos que aprendan a querer a éstos vehículos tal y como son, que aprendan a mantenerlos, a manejarlos, y también a entenderlos, porque no tienen computadora. Termino esto diciendo que el mejor museo para un auto antiguo es la calle, los caminos.
_________________ Saludos.
"Alpha Charly", o sea Adrián Chilavert
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